INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN
@ClaudioCascales
1.
ETIMOLIGÍA Y
DEFINICIÓN
La palabra PERCUSIÓN procede del verbo latino percutio-ere
(golpear, batir), cuyo prefijo deriva de la preposición de acusativo per (a través de, por medio de), seguida
del verbo transitivo quatio (sacudir,
golpear, batir).
Se puede definir
como INTRUMENTO DE PERCUSIÓN a cualquier instrumento musical -u objeto sonoro
de cualquier otra naturaleza- que produzca su sonido al golpear, entrechocar, agitar,
friccionar, puntear, etc. (bien con las propias manos, los dedos, pies, a
través de baquetas o sistema mecánico -o cualquier combinación de todos ellos-), de un cuerpo elástico de cualquier
material (natural o sintético).
2.
DENOMINACIONES
PERCUSIÓN
|
||||
INGLÉS
|
FRANCÉS
|
ITALIANO
|
ALEMÁN
|
RUSO
|
Percussion
|
Batterie
|
Percussione
|
Schlagzeug
|
Перкуссия
|
3.
CLASIFICACIÓN DE LOS
INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN
TRADICIONAL (Derivada de la
Orquesta sinfónica)
|
|||
Instrumentos de sonido determinado
|
Instrumentos de sonido indeterminado
|
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CURT SACHS y E. Von HORBONSTEL (Empírica)
|
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Idiófonos
|
Membranófonos
|
||
CLASIFICACIÓN
ACTUAL (Construcción y técnica instrumental)
|
|||
Membránas
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Láminas
|
Planchas
metálicas
|
Pequeña
percusión
|
4.
BREVE HISTORIA
Tras la voz, el instrumento más natural y expresivo, capaz de transmitir los sentimientos y emociones más profundos, la
percusión del propio cuerpo (palmadas, golpes en pecho, muslos... y fuertes pisadas en el suelo), fue el primero de los instrumentos musicales de la
historia relacionado con el ritmo -el
elemento musical más primitivo y asociado a la danza-, allá por los albores de
la humanidad. El siguiente paso fue la utilización de objetos que el entorno
proporcionaba al hombre como instrumentos percutidos -piedras, troncos, palos, huesos,
conchas, etc.-, tanto con las propias manos, como con baquetas rudimentarias o
chocándolos entre sí, he incluso friccionándolos y/o agitándolos.
A partir de ese
hecho y progresivamente, se tiene constancia de que, ya en el Neolítico, en
torno al 9.000 a. C., el hombre se encontró en disposición de manufacturar de
manera, aún muy rudimentaria, sus primeros instrumentos musicales de percusión,
al tiempo que aprovecha utensilios de su entorno cotidiano con el mismo fin,
cumpliendo funciones ceremoniales, rituales, festivas, mágicas, relacionadas
con las actividades de su ciclo vital y su conexión con fenómenos de la
naturaleza y el mundo espiritual.
Desde entonces y
gradualmente los instrumentos de percusión van apareciendo y evolucionando en
torno al contexto socio-cultural y musical de las distintas civilizaciones de
la antigüedad: Mesopotamia, Persia, Egipto, China, Japón, Incas, Mayas, Grecia,
Roma, etc., asociados a multitud de actividades tanto religiosas como paganas.
Durante la Edad
Media los instrumentos de percusión tienen su contexto natural en la música
popular profana, debido a la expresa prohibición de ser utilizados en la música
religiosa, por su condición de paganos y portadores del ritmo, sin duda el
elemento musical más denostado por la Iglesia, por su alto contenido excitante
y por tanto inadecuado para crear el clima ideal para el culto.
En esa época la
cantidad de instrumentos de percusión se amplió notablemente, muchos de ellos
fueron traídos a Europa por dos vías principales: la primera desde comienzos
del siglo VIII, por la Península Ibérica tras la invasión musulmana y la
segunda por el este, desde Tierra Santa por los Cruzados (a partir del siglo
XII). Ambas vías fueron con toda seguridad el origen, la función y los contextos,
en los que los fueron utilizados los instrumentos de percusión hasta el siglo
XV.
Posteriormente, tras
la Caída de Constantinopla (1453), los instrumentos de percusión fueron
asociados junto a la trompetería -sobre todo timbales y tambores-, a la alta
aristocracia y a la música militar: caballería (timbales), infantería
(tambores), como símbolos de grandeza y poder, junto a escudos, estandartes y
banderas.
Se atribuye al
compositor italiano Orazio Benevoli (1605-1672), la primera inclusión de los timbales, -y por
tanto de los instrumentos de percusión en la orquesta-, en su Misa festiva para la Consagración de la
Catedral de Salzburgo (1628), una obra característica del Barroco colosal, también llamada Missa Salisburgensis á 53 voci, atribuida muy posteriormente Heinrich Ignaz Franz Biber (1644-1704), y datada de la misma forma mucho después en 1682. En la partitura los timbales doblan en todo momento a las trompetas en dos grupos colocados antifonalmente (Loco I y Loco II). Bien es verdad que se especula con la posibilidad de que los timbales fueran utilizados mucho antes en este tipo de piezas, a pesar de no estar acreditados en las partituras, desde comienzos del siglo XVII (La Favola d'Orfeo; Claudio Monteverdi, 1607).
Un hecho que puede
ilustrar la progresiva relevancia de los instrumentos de percusión en la
historia de la música occidental y más concretamente en su participación y
desarrollo en la orquesta sinfónica es que, a partir del siglo XVI, aparecen en
todos los grandes tratados prácticos de organología, desde Musica
Getutch de Sebastian Virdung (1511), hasta el Syntagma musicum de Michael Praetorius (1614-19).
Los instrumentos de percusión pasaron en apenas cien años, de ser
utilizados casi de manera anecdótica, por los compositores de finales del
Barroco y comienzos del Clasicismo, en contadas ocasiones en obras de carácter
ceremonial: misas solemnes, coronaciones, bodas reales y aristocráticas y otros
grandes fastos, doblando y reforzando las intervenciones regias de los
instrumentos de metal, marchas, procesiones y desfiles, a tener sus primeras intervenciones en la música
dramática e incidental: Thésée (J.B.
Lully, 1675), Esther (N.A. Strungk,
1680); sus primeros solos concertantes: The
Fairy Queen (H. Purcell, 1692); y finalmente su inclusión como instrumento
de “color” y exotismo, gracias a la moda por lo oriental en la segunda mitad
del siglo XVIII, procedente de la música de la Banda de Jenízaros, guardia militar de
infantería otomana, la cual utilizaba para sus desplazamientos una agrupación de
instrumentos de percusión formada por: bombo, platos chocados, crótalos,
pandereta, triángulos y el denominado “pabellón turco” (creciente turco o
sombrero chinesco). En un principio, el
término "Música turca" (Musica alla turca) significaba cualquiera o todos los diversos
instrumentos tomados de la banda jenízara. En última instancia, el término se
convirtió en sinónimo del uso del bombo, platillos, triángulo, y a veces la
pandereta.
Pabellón turco (Universidad de Edimburgo)
La inclusión de la denominada “Percusión turca”, tanto en
el género operístico por compositores como C.W. Gluck (Alceste,
1767), o W.A. Mozart (El rapto en el serrallo,
1782), y su definitiva consolidación en la música sinfónica: F.J. Haydn (Sinfonía nº 100 en SolM “Militar”,
1794), y L. van Beethoven (Sinfonia
nº 9 en Rem “Coral”, 1824), marcaron el camino y la dirección en la que los
instrumentos de percusión se desenvolverían a lo largo de todo el siglo XIX y
comienzos del XX, con intervenciones estelares en las obras de Rossini,
Berlioz, Bizet, Wagner, Saint-Saëns, Rimsky-Korsakov, Tchaikovsky, Puccini,
Mahler, Debussy, Strauss, Stravinsky, solo por nombrar los más destacados.
Una buena muestra de la importancia adquirida
por los instrumentos de percusión y su transcendencia en la música para
orquesta es que, desde ese momento han tenido un destacado lugar tanto en
construcción y descripción, como en posibilidades tímbricas y técnicas en todos
los tratados importantes de orquestación e instrumentación, desde el Gran tratado de instrumentación y
orquestación moderna de Hector Berlioz (1844).
Pero sin duda la eclosión del mundo de los
instrumentos de percusión llegó en el periodo denominado “de entreguerras” ya en el siglo XX, entre la Gran Guerra (1914-1818)
y la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), debido a la crisis de valores sociales
y morales, que provocan que se originen y desarrollen una serie de movimientos,
tendencias artísticas y de pensamiento, que fueron referencia y paradigma a lo
largo de todo el siglo XX.
Para entender la definitiva presencia,
evolución e importancia de los instrumentos de percusión en la orquesta actual,
hemos de hacer referencia a varios hechos que han sido fundamentales para su
desarrollo, ya que si bien se originan dentro la música de cámara, el grupo de
percusión o la música concertante, por las características de la orquesta del
siglo XX, se incluyeron con naturalidad y sin reservas hasta llegar a ser una
sección con tanto peso, personalidad y protagonismo como cualquier otra.
El primero es la aparición del denominado set de percusión, es decir una serie de
instrumentos entorno a un solo intérprete, influenciado por la batería de jazz
y la música de cabaret y vodevil, incluido en la obra teatral de cámara para
siete instrumentos y narrador La historia
del soldado (1918), de Igor Stravinsky (1882-1971).
El segundo serían los últimos dos movimientos
de Rítmicas -V y VI- (1930), para
grupo de percusión con instrumentos y ritmos cubanos (las Rítmicas I-IV son para sexteto de viento con piano), del compositor
Amadeo Roldán (1900-1939). Tras Rítmicas y
con mucha más repercusión internacional se estrenaría Ionisation (1931), de Edgard Varèse (1883-1965), la primera obra
escrita íntegramente para ensemble de
percusión en un solo movimiento.
El tercero sería la inclusión de nuevos
instrumentos con nuevas sonoridades y/o afinaciones, a veces inventados, a
veces reciclados de cualquier material, en otras ocasiones cotidianos, máquinas
e instrumentos eléctricos y electrónicos, de la mano de compositores que
podríamos calificar de experimentalistas como Luigi Russolo, George Antheil, Charles
Ives, Harry Parch, Henry Cowell, John Cage, Lou Harrison, etc.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el panorama
musical de la Era posmoderna se multiplica, con la globalización, el
pluralismo, el eclecticismo, el avance de la tecnología y la cantidad de
lenguajes composicionales, en muchas ocasiones personales, sin miedo a la
experimentación, que hacen de estímulo para la creación sonora sin límites, en
los que los instrumentos de percusión tienen una presencia y protagonismo que
no da ningún lugar a la duda.
De importancia capital para la historia de
los instrumentos de percusión para un solo intérprete Zyklus, de Karlheinz Stockhausen (1928-2007), estrenada de agosto
de 1959, dentro del Curso de verano de Darmstadt de aquél año por el
percusionista alemán Christoph Caskel, pieza novedosa en todos sus aspectos:
composición (aleatoriedad abierta), notación gráfica, multipercusión, etc.
Si bien es verdad que esta pieza no se
hubiera podido llevar a la práctica interpretativa a cabo si no se hubieran ido
produciendo una serie de avances técnicos, tanto interpretativos inusitados
hasta el momento, gracias a los pioneros de la pedagogía específica para
instrumentos de percusión, en las primeras dos terceras partes del siglo, sobre
todo en Norteamérica y Europa como fueron: George Lawrence Stone, Paul Price, Felix
Passerone, Richard Hochrainer, James Blades, Leonida Torrebruno, entre otros
muchos, los cuales crearon las primeras escuelas de técnica y estilo:
americano-rudimental, francesa, alemana, contemporánea, experimental, etc., a
los que posteriormente se sumaron profesores tan reconocidos en las últimas
décadas del siglo como: Jim Chapin, Mitchell Peters, John Beck, Leigh Howard
Stevens, Jean Batigne, Jacques Delècluse, Karl Peinkofer, Siegfried Fink, Jan Pustjens,
etc.
A todos ellos habría que añadir la apuesta
por la mejora de construcción, calidad y sonoridad –con la esporádica invención
de nuevos instrumentos-, así como competitividad y asequibilidad económica de
las grandes marcas de instrumentos de percusión como: Yamaha, Studio 49,
Ludwing/Musser, Malletech, Grover, Premier, Pearl, Paiste, Zildjian, Sonor,
etc., por una parte, y por otra el apoyo de las grandes editoriales de música
como: Faber & Faber, Boosey and Hawkes, Ludwing Music, Ricordi, C.F.
Peters, Schott music, Breitkopf, Schirmer Books, Zimmerman, Simrock, Carl
Ficher, Alphonse Leduc, Salabert, Studio 4, Kendor Music, Ongaku Tomo, y un
largo etcétera.
Destacar aquí finalmente una reducida
relación de intérpretes solistas que desde mediados del siglo pasado han ido
dando a conocer el mundo de los instrumentos de percusión, estrenando muchos de
ellos obras que han pasado por derecho propio a hacerse referentes, no sólo de
las piezas para instrumentos de percusión, sino también de la historia de la
música, colaborando y motivando a compositores, y creando escuela en muchos
casos, a saber: Clair Omar Musser, William Kraft, Michael Colgrass, Max
Neuhaus, Jan Williams, Jean Pierre Drouet, Gaston Sylvestre, Mircea Ardeleanu, Gary Burton, Sylvio Gualda, Keiko
Abe, Christoph Caskel, Peter Prommel, Evelyn Glennie, Peter Sadlo, Steven
Schick, Michael Burrit, Nebojsa Jovan Zivkovic, etc., a los que podemos sumar
los grupos-ensembles de percusión
como: Blackearth Percussion Group, Les Percussions de Strasbourg, Quatour
Helios, The, Kroumata, Nexus, Amadinda, etc.
SELECCIÓN
DE OBRAS
(imprescindibles
del siglo XX)
|
|||
Nº
|
Obra
|
Compositor
|
Año
|
1
|
La
consagración de la primavera
|
Igor Stravinsky
|
1913
|
2
|
Historia del soldado
|
Igor Stravinsky
|
1918
|
3
|
La création du
monde
|
Darius Milhaud
|
1923
|
4
|
Rítmicas
V y VI
|
Amadeo Roldan
|
1930
|
5
|
Concerto pour batterie et petit
orchestre
|
Darius Milhaud
|
1930
|
6
|
Ionisation
|
Edgard Varèse
|
1931
|
7
|
Música
para cuerdas, percusión y celesta
|
Béla Bartók
|
1936
|
8
|
Sonata
para dos pianos y percusión
|
Béla Bartók
|
1937
|
9
|
Third Construction
|
John Cage
|
1941
|
10
|
Toccata
|
Carlos Chávez
|
1942
|
11
|
Le
marteu sans maitre
|
Pierre Boulez
|
1955
|
12
|
Concertino für Vibraphone
|
Siegfried Fink
|
1958
|
13
|
Zyklus
|
Karlheinz Stockhausen
|
1959
|
14
|
Circles
|
Luciano Berio
|
1960
|
15
|
The
King of Denmark
|
Morton Fedman
|
1964
|
16
|
Eigth
pieces for four timpani
|
Elliot Carter
|
1950-66
|
17
|
Intérieur I
|
Helmut Lachenmann
|
1966
|
18
|
Drumming
|
Steve Reich
|
1971
|
19
|
Time
for Marimba
|
Minoru Miki
|
1968
|
20
|
Psappha
|
Iannis Xenakis
|
1975
|
21
|
Nuages
Noires
|
Edison Denísov
|
1984
|
5.
NOTACIÓN Y
SIMBOLOGÍA
Aunque en la actualidad no existe un sistema de notación estandarizado para los instrumentos de percusión, podemos encontrar sobre ellos algunos excelentes tratados de referencia como son el libro, ya clásico de Erhard Karkoschka Das Schriftbild der Neuen Musik (Moeck, 2004), y Music Notation in the Twentieth Century: A Practical Guidebook (Norton, 1980) de Kurt Stone, entre otros.
Al
margen de estas referencias bibliográficas en cuanto a la notación para la
música actual en general y los instrumentos de percusión específicamente, en la
actualidad hay una gran cantidad de compositores que utilizan sus propios
sistemas notacionales no universalizados, por lo que, en la mayoría de los
casos podemos encontrar en las partituras un glosario
o leyenda de explicaciones –lo más detallada posible- para ejecutar diferentes
pasajes, golpes o efectos conforme los concibió el autor. También se hace necesario
realizar un croquis minuciosamente estudiado de la colocación del set (grupo de
instrumentos entorno a un único intérprete), si lo hubiera, con el fin de
facilitar la ejecución al intérprete. Así, podríamos dividir en tres apartados
las escritura para los instrumentos de percusión:
El
primero se denomina Notación Simbólica,
Pictográfica o Ideograma y estaría
destinado al reconocimiento de los instrumentos, así como del tipo de baquetas
a utilizar y formas específicas de interpretación en las diferentes partituras,
que es el apartado más estandarizado que hay gracias a los trabajos de varios
compositores/percusionistas que han hecho un gran esfuerzo en universalizar
este tipo de contenidos en las partituras como son: Notazione per Strumenti
a Percussione de Leonida Torrebruno (Bèrben) o Tablature
72 de Siegfried Fink (N. Simrock).
El segundo apartado estaría
dedicado al marco donde se escriben los propios signos de notación que va desde
el Pentagrama, en el cual se pueden anotar partituras para instrumentos
tanto de sonido indeterminado (con clave neutra), como para instrumentos de
sonido determinado, incluso al Endecagrama (con claves de Sol en 2ª y Fa
en 4ª). También es muy empleada la llamada Notación lineal, en la cual
se utiliza una línea para cada instrumento (o grupo de ellos). Esta fórmula comienza
con el monograma siendo ampliable al bigrama, trigrama o tetragrama o incluso
más de cinco líneas.
Otro tipo de notación es la
denominada Notación ilustrada, claramente originada en el Grafismo
simbólico y el Arte conceptual, muy recurrente para el teatro
experimental y el happening, la cual se caracteriza por realizar dibujos
explícitos (incluso a color), de los movimientos, acciones, interacciones y
formas de ejecución, dando posibilidades casi ilimitadas, en las que la
motivación, creatividad e implicación del intérprete determinará en buena
medida el resultado final de la pieza. Ejemplos de esta notación se encuentran
en las obras de Berio, Ligeti, Kagel, Crumb o Schnebel.
El
tercer aparatado correspondería a la propia notación de los diferentes
parámetros del sonido, es decir, altura, duración, intensidad y timbre.
Evidentemente al margen de la notación tradicional podemos apuntar algunos
aspectos relacionados con estos tres parámetros: a) altura: se procurará una
notación en vertical de notas agudas a graves (de arriba abajo; b) la duración:
dependerá de lo alargada que sea la nota y/o distancia con respecto a las
siguientes; c) intensidad: se distinguirá por el tamaño de la nota (más grande
más fuerte y más pequeña más suave); y c) el timbre por el diseño de la cabeza
(o núcleo), de la nota independientemente de si hemos indicado con un símbolo
el instrumento que interviene en un momento dado.
También existen otras formas
de notación como son la gráfica, la textual, con rectángulos o cajas, en
ejes de simetría, etc… Siendo la tendencia actual a utilizar el sistema de Notación
combinada o mixta, empleando por tanto, en cada momento el más
oportuno dependiendo del tipo de música, instrumentación, modos ejecución o
formas de expresión que con más claridad implemente la interpretación musical.
Como recomendación podemos concluir
que, se ha de ser lo más explícito posible a la hora de anotar una partitura
para instrumentos de percusión, tanto en el reconocimiento de los instrumentos,
los distintos parámetros del sonido, su expresión, su carácter y sus modos de
ejecución específicos si los hubiera. Para ello sería muy positivo el trabajo
en equipo del compositor con un intérprete especialista, formando tándem
artístico a la manera de Sylvio Gualda-Iannis Xenakis o Christoph Caskel-Karlheinz
Stockhausen.
6.
BAQUETAS
Las baquetas o mazas
son los elementos mediadores que se utilizan habitualmente para producir el
sonido en los instrumentos de percusión, determinando en muchos casos su
timbre. Pueden ser de multitud materiales, durezas, longitudes, grosores y
cabezas. Presentamos una relación ad hod
de carácter general.
TIPO DE BAQUETA
|
INSTRUMENTO
|
De madera
|
Caja, tambores, toms, platos, etc.
|
De madera con cabeza de fieltro
|
Timbales, toms, platos, etc.
|
De madera con cabeza de madera, goma, plástico, hilo,
nailon o lana
|
Marimba, vibráfono, xilofón, glockenspiel, crótalos,
platos, etc.
|
Baquetas de doble cabeza (multitud de variantes)
|
Multipercusión (un solo intérprete)
|
Escobillas
|
Caja, toms, timbales, platos, gong
|
Varillas de triángulo
|
Triángulo, platos, gongs, cowbell, etc.
|
Mazas
|
Bombo, gongs, tam-tams
|
Martillos
|
Campanas tubulares
|
Otros elementos mediadores pueden ser, sin descartar
ningún otro:
-
Arcos de violoncelo o contrabajo
-
Manos (palmas, puños, nudillos, yemas de los dedos,
uñas…)
-
Codo, rodilla, pie…
-
Diferentes utensilios: monedas, dedales, cadenas, pelotas
de ping-pong…
-
Otros instrumentos como baquetas: maracas, pandereta,
triángulo…
Para una mayor información se hace necesario consultar
las webs de las marcas de baquetas más prestigiosas del mercado: Vic Firth,
Pro-Mark, Mike Balter, Malletech, Vibrawell, Adams, Latin Percussion, Lefima,
etc.
7.
TÉCNICAS ESPECÍFICAS
BÁSICAS DE LOS INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN
La descripción de
las técnicas específicas para todos y cada uno de los instrumentos de percusión,
obviamente no se pueden desarrollar en un trabajo de carácter general como el
presente, por lo que nos limitaremos a exponer básicamente aquellas técnicas y
posibilidades de los instrumentos más importantes y de las cuales parten la
multitud del resto de instrumentos de la familia. Imposible abarcar aquí
instrumentos de origen étnico.
CAJA
La técnica
fundamental de caja se podría resumir en: a) golpes simples (RLRL), paradiddles
(RLRR LRLL), b) redobles: simple (RL), abierto (RRLL), cerrado (multi-rebote), c)
mordentes: una, dos, tres notas o más y d) rudimentos: Se denominan Rudimentos a 40 patrones rítmicos usados
por los percusionistas en las bandas de marcha desde hace cientos de años. Se
dividen en 4 categorías: redobles (rolls), paradiddles (diddles), apoyaturas
simples (flams), y apoyaturas dobles (drags)[1].
TIMBALES
Básicamente en los timbales podemos aplicar las mismas
posibilidades técnicas de la caja, adaptando el golpeo a las baquetas
específicas de este instrumento, presión del parche, afinación, extensión o
rango de los registros (tesitura), golpes (legato, stacatto…), dampenig
(apagado), redoble (solo simple), acordes y glissandi.
INSTRUMENTOS DE LÁMINAS
Las técnicas interpretativas, así como tímbrica de los
principales instrumentos de láminas: xilofón, marimba, vibráfono y glockenspiel
(también se suelen incluir otros como las campanas tubulares, los crótalos y la
celesta), dependerán tanto de su material de construcción (madera o metal), su
resonancia y afinación (grosor y anchura de las láminas y de los tubos), su
rango (tesitura), el uso de distintos tipos de baquetas y las posibilidades de
ejecución con dos, tres, cuatro o más baquetas y en el caso del vibráfono la
utilización o no del motor (motor on,
motor off), y en su caso velocidad de
giro del motor que puede ser (slow, quick…), así como la utilización del
pedal de expresión y la técnica del dampenig asociada a él. Independientemente
podemos implementar cualquier aspecto relacionado tanto con los instrumentos de
membranas como los de cualquier instrumento de teclado.
En los instrumentos de láminas podemos utilizar, así
mismo diferentes tipos de redobles o trémolo: redoble simple, secuenciado,
mandolina (dos baquetas en una sola lámina –alternado o por encima y por
debajo-)
8.
POSIBILIDADES
SONORAS
Sería algo que
extralimitaría la intención de esta breve exposición, sobre los instrumentos de
percusión, abarcar la infinitud de posibilidades sonoras de nos puede ofrecer
esta amplia y rica familia instrumental, aun así enumeraremos algunas de las
posibilidades sonoras y efectos más representativos, animando al lector a
experimentar e investigar sobre otras muchas que, con toda seguridad en un
momento determinado podrían ser susceptibles de incluir en una pieza o pasaje
de una obra.
Water gong
|
Se produce al introducir un gong o tam tam en un
barreño con agua mientras se percute
|
Armónicos
|
Apagando levemente con uno o dos dedos un parche o
lámina, mientras percutimos con una baqueta
|
Plato en timbal
|
Redoble en un plato colocado con la campana hacia abajo
sobre el parche del timbal realizado al tiempo un glissadi
|
Piano como instrumento de percusión
|
Multitud de posibilidades, tanto en el teclado como en
las cuerdas o la propia caja de resonancia
|
Instrumentos preparados
|
Con el fin de enriquecer tímbricamente un instrumento
podemos aplicarle multitud de objetos con el fin de que vibren por simpatía o
cualquier otro aspecto que pueda ser interesante
|
Sordinas y apagadores
|
Aplicar sordinas y apagadores con el fin de velar y/o
mutar el sonido original de un instrumento
|
Incluir instrumentos étnicos
|
Con el fin de ampliar el espectro sonoro de una pieza
se puede incluir instrumentos poco utilizados de músicas africanas,
asiáticas, latinas, etc.
|
Posibilidades tecnológicas, electrónicas y
electroacústicas y ordenador
|
Las posibilidades de enriquecer la sonoridad de la
familia de los instrumentos de percusión aquí nos desbordan, desde la simple
amplificación de un instrumento con o sin tratamiento de efectos: delay,
overdrive, flanger, etc, hasta la grabación y posterior utilización como
parte de la obra en directo, las cajas de ritmo, sintetizadores o
controladores MIDI etc, etc.
|
Creación de instrumentos
|
Inventar un instrumento propio asociado a una
determinada obra (Niké, Cruz-Guevara, 1996)
|
9.
UTILIZACIÓN DE LOS
INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN EN LA ORQUESTA SINFÓNICA
UTILIZACIÓN DE LOS INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN EN LA
ORQUESTA
|
|
UTILIZACIÓN
|
EJEMPLO
|
Melódico
|
Bartók, Música
para cuerdas, percusión y celesta
|
Melodía de timbres
|
Schoenberg, Fünf
Orchesterstücke, op. 16
|
Armónico
|
Haydn, Sinfonía nº
94 en Sol M “La sorpresa”
|
Contrapuntístico
|
Carter, Concierto
para orquesta
|
Tonal
|
Beethoven, Concierto
para violín en ReM op.
|
Tímbrico
|
Rimski-Kórsakov, Scheherezade
|
Espacial
|
Berlioz, Sinfonía
Fantástica op. 14
|
Dinámico
|
Tchaikovski, Obertua 1812
|
Rítmico
|
Stravinsky, La
Consagración de la primavera
|
Ostinato
|
Ravel, Bolero
|
Grupo instrumental (4 dimensión)
|
Revueltas, La
noche de los Mayas
|
Dramático
|
Strauss, Muerte y
transfiguración op. 24
|
Clímax
|
Wagner, El ocaso
de los dioses
|
Efectos
|
Gershwin, Un
americano en París
|
Sonoridades exóticas
|
Cruz-Guevara, Áhimsa
|
Apoyo a otras secciones
|
Prokofiev, Alexander
Nevsky
|
Combinación
de todas
|
Mahler, Sinfonía
nº 6 en Lam
|
10. BIBLIOGRAFÍA
ARAGU, D.: Los instrumentos de percusión (Madrid,
Música mundana, 1995)
BLADES, J.: Percussion Instruments and Their
History (London, Faber and Faber, 1984)
CASCALES, C.: Historia, descripción y pedagogía de los
instrumentos de percusión (Sin editar, 1990)
FACCHIN, G.: Le Percusión (Torino, EDT, 2000)
VERA PINTO, C.: Manual de percusión Santiago de
Chile (Universidad Católica de Chile, 2001)
SMITH BRINDLE, R.: Contemporany Percussion
(London, Oxford University Press, 1970)
TEMES, J.L.: Los instrumentos de percusión en la
música actual (Madrid, Digesa, 1979)
[1]
Se pueden consultar en http://www.pas.org/docs/default-source/default-document-library/pasdrumrudiments2015.pdf
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